Propuesta única de valor

Diferenciar nuestra marca de las demás marcas no siempre es tarea fácil. Lo mismo ocurre con el producto o el servicio que ofrecemos.

Tenemos que ser creativos y crear una propuesta de valor que nos ayude a diferenciarnos de nuestra competencia, algo que haga que los consumidores nos elijan a nosotros antes que a los demás. 

Nuestra propuesta de valor debe hacernos capaces de satisfacer las necesidades o deseos de nuestro público objetivo y debe de definir algo más que únicamente nuestras habilidades y conocimientos, son importantes, pero no lo son todo y menos en este caso.

La propuesta de valor no es lo que crees que necesitan tus consumidores, si no lo que realmente necesitan. ¿Quién mejor que ellos mismos para decirte cuál es la necesidad real que tienen? Y no hace falta que les preguntes, bastará con que los conozcas.

¿Qué es la propuesta de valor?

La propuesta de valor, es aquello que te permite comunicar de forma eficaz cómo tus productos o servicios van a satisfacer las necesidades de tus clientes, qué beneficios les aportarán y qué diferencia tu producto o servicio de los otros.

¿Quizás sea más fácil decirte lo que no es una propuesta de valor?

Una propuesta de valor no debe confundirse con cualquier otra herramienta de marketing. Cuando hablamos de una propuesta de marketing no hablamos ni de eslogans, ni de enunciado de posicionamiento.

¿Cómo se construye una propuesta de valor? 

Si quieres desarrollar tu propuesta de valor prueba a seguir estos consejos:

  1. Enumera las principales ventajas de tu marca, de tu producto o de tu servicio. Siempre de más a menos relevante siempre.
  2. Observar tu competencia ¿Cuáles son tus fortalezas frente a ella?
  3. Define en qué situaciones tu producto resuelve las necesidades de tus clientes. Un ejemplo sería: Permite ahorrar tiempo, es más económico, etc.

¡Ojo!, no basta con conocer nuestra propuesta de valor, tenemos que ser capaces de comunicarla. Y no solo comunicarla, sino, comunicarla de forma efectiva.

Efectiva y además, afectiva.

¿Sabías que las emociones conforman el 90% de nuestras decisiones a lo largo del día? Al ser así deberemos de tocar el corazón a nuestros clientes para que nos elijan, ¿No crees?

Por eso, el último paso sería crear una frase que sintetice las ideas que has obtenido de los apartados anteriores.

Trucos y claves para definir tu propuesta de valor

Supongo que a estas alturas tendrás más que claro que una propuesta de valor es aquello que hará que un cliente se incline por tu marca en lugar de escoger el de la competencia. Ahora que ya has construido tu propuesta de valor te queda definirla.

Veamos cómo.

Define a tu cliente ideal o tu buyer persona

Lo primero que debes de tener claro es quién es tu cliente ideal, tu público objetivo. Es complicado que conozcas las necesidades de tus consumidores si no los conoces.

Lo que significa que difícilmente podrás ayudarles y ofrecerles una solución a un problema si no sabes quién son y, por lo tanto, mucho menos qué necesidades deben de satisfacer.

Identifica su necesidad o problema

Para conocer el problema o necesidad de tus clientes tendrás que conocer tu nicho de mercado y las razones por las cuales consumen o dejan de consumir tu marca.

Esto es más sencillo de lo que puedes creer. Hoy en día es muy sencillo conocer a nuestros clientes gracias a las redes sociales en las cuales comparten muy a menudo sus gustos.

Genera una comunicación fluida con tus clientes,  potencia el feedback continuo. Pero recuerda que el feedback puede ser positivo o negativo pero eso no tiene porque ser malo, porque te ayudará a mejorar también tu propuesta de valor.

Supera las expectativas de tu cliente

Si sabes que esperan tus clientes de ti puedes sorprenderlos dándoles aquello que esperan y más. Debemos hacer aquello que prometemos hacer, no crear falsas esperanzas porqué de esta manera perjudicamos nuestra propia imagen lo cual será muy negativo para nuestra marca.

Los clientes siempre tienen expectativas previas al consumo de producto o servicio. Es mucho más positivo tratar de superarlas siempre para asegurar una experiencia positiva de nuestros clientes. 

Recuerda es muy importante sorprender a nuestros clientes y aún más los es crear emociones positivas.

Identifica las necesidades que satisface tu producto o servicio

En este punto debes centrarte en las preocupaciones, necesidades y deseos que tu producto o servicio satisface a los consumidores. Si eres capaz de ver esto, serás capaz de empatizar mejor con tus clientes. 

La mejor manera de conocer el comportamiento de tus clientes es conocer sus aspiraciones y sus preocupaciones reales, además, así podrás personalizar el contenido que compartas con ellos evitando que tus mensajes sean fríos e impersonales. 

Asegúrate de que tu propuesta de valor queda bien definida y es comprensible para tus clientes

De nada sirve conocer a tu cliente ideal o buyer persona e identificar sus problemas o necesidades, si no eres capaz de comunicar de forma clara tu propuesta de valor: No lograrás nada si no sabes comunicarlo como toca.

Una vez definido tu público objetivo y sus deseos o necesidades, lo más importante será convencerlo de que tu producto o servicio es mejor que el de la competencia, convencerles de que tu valor añadido es más beneficioso para ellos que el de la competencia.

Y cuando digo valor no me refiero al valor monetario si no al hecho subjetivo que hace que tu producto o servicio se diferencie de los demás y sea visto como mejor. También deberás de tener en cuenta la atención al cliente, que es una de las claves imprescindibles.

Trabajando tu estrategia de comunicación, tu imagen de marca y tus relaciones con los clientes podrás tener éxito.

Recuerda que una correcta estrategia de comunicación es vital para lograr las claves de tu propuesta de valor. Si necesitas ayuda para definir tu estrategia de comunicación o consejo sobre cómo identificar tu propuesta de valor no dudes en concertar un consultoría con nosotros.   

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